El azúcar no es necesaria, además de ser nociva para la salud. Desafortunadamente se ha creado una cultura insalubre del azúcar, por lo que en la actualidad muy pocos niños o ninguno, tienen noción del sabor de los cereales en su forma natural, inclusive de las frutas, pues prefieren las mermeladas. A menudo si a un niño se le da a elegir entre un jugo de naranja natural y un refresco artificial, el 95% prefiere el segundo. Se estima que el azúcar constituye el 25% de la cantidad de calorías diarias que consumimos, pero por no contener ningún aporte nutricional, se considera una fuente de calorías vacías. La cantidad de azúcar que se agrega hoy en día a los productos, principalmente a los de uso infantil, es impresionante y crea adicción y una la falsa creencia de que las cosas tienen que ser dulces.
El ser humano lo que necesita en su nutrición son carbohidratos de donde se obtiene la glucosa que requiere el organismo. Mientras más integrales sean los carbohidratos que se consumen, mucho mejor. El consumo de productos con azúcar se relaciona con la obesidad, depresión, problemas cardiovasculares, infartos cerebrales y de corazón, úlceras y la temida diabetes que provoca tantos problemas de salud en el mundo y va en aumento. El azúcar en la sangre puede ocasionar hiperglucemia y originar graves problemas de salud, inclusive daños a los vasos sanguíneos, que son los que conducen la sangre a los órganos. El azúcar es también desmineralizante, influye en el aparecimiento de caries dentales de niños y adultos, pues incentiva la producción de bacterias en la boca y el estómago. El azúcar llega a adherirse en el esmalte dental, contribuyendo a los problemas dentales. De igual forma, el consumo de azúcar hace más propensos a los niños a enfermedades de origen viral y a la disminución del calcio en los huesos. Además los hace más irritables e hiperactivos.
Haz la prueba
Deja el azúcar por un mes y verás que tu salud mejorará. Puedes utilizar algo de miel de abejas. Has una cura al menos por un mes, trata de probar las cosas sin endulzar o con muy poco dulce y verás que las cosas tienen su sabor natural. Recuerda: “no siempre lo dulce artificial es bueno, existe otra dulzura mucho mejor, la dulzura de la salud natural”.